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Investigan cómo la Cordillera de los Andes podría favorecer la ocurrencia de tornados

23 Julio 2019

El especialista en eventos extremos Bradford Barret está desarrollando la hipótesis en la UV.

El investigador de eventos extremos Bradford Barret, profesor de la Academia Naval de Estados Unidos y PhD en Meteorología de la Universidad de Oklahoma, se encuentra de visita en la Universidad de Valparaíso realizando un estudio colaborativo sobre los últimos tornados ocurridos a fines de mayo en la zona del Biobío y que causó estragos en Los Ángeles, Concepción y Talcahuano, donde se registraron ráfagas de viento que alcanzaron los 217 kilómetros por hora.

La estadía del investigador es producto de un proyecto MEC (Modalidad Estadías Cortas), que llevan a cabo científicos del departamento de Meteorología UV. En ese marco, el doctor Barret ofreció la conferencia "Tornados recientes de Chile. Análisis preliminar y diferencias con tornados en Estados Unidos", en la que explicó cuáles son los elementos precursores de este tipo de fenómenos naturales y cómo las características topográficas del país podrían favorecer la ocurrencia de estos eventos.

“Para generar un tornado primero se necesita una tormenta eléctrica y luego se suman una fuente de ascenso, una cortante de viento, inestabilidad y humedad en la superficie. Estos elementos son como una receta y no varían, independiente del lugar donde se desarrolle”.

El doctor Barret explicó que su área de interés es el estudio de los eventos extremos, como lluvias intensas, tormentas, ráfagas y granizo. “De hecho, con mis colegas del Departamento de Meteorología de la Universidad de Valparaíso propusimos a Conicyt investigar eventos extremos en Chile y coincidentemente con mi visita ocurrieron los tornados. Es interesante estudiar estos eventos en Chile, porque en Estados Unidos no existe la cadena montañosa que hay acá y es relevante investigar cómo una topografía como los Andes podría influir en el desarrollo de este tipo de eventos”.

Agrega que “en el mundo de los investigadores del área nadie menciona a Chile en la lista de los países más expuestos a los tornados, por lo tanto es un evento muy extraño. Además, ocurrieron durante dos días consecutivos y en la misma región, eso también es muy interesante de estudiar científicamente, me llama mucho la atención”.

El doctor Barret se ha convertido en un verdadero cazador de tornados, ha presenciado cerca de cincuenta en su vida, el último fue en las grandes planicies de Oklahoma, Estados Unidos, el 2017.

“Los tornados solo se pueden anticipar en el corto plazo, media hora antes. Son intensos y breves, el promedio de vida de un tornado es de diez minutos aproximadamente, por lo tanto lo único que puedes hacer es buscar un lugar seguro. No obstante, para mí como científico es muy emocionante presenciar un tornado, porque nosotros pasamos horas estudiando el pronóstico, manejando la ruta del fenómeno y luego cuando llegas al lugar tienes solo diez minutos, en promedio, de emoción”, afirmó.