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Enfermería-San Felipe realizó capacitación sobre Guías de Práctica Clínica en la calidad del cuidado

17 Diciembre 2019

La jornada estuvo dirigida a profesionales de la enfermería de Aconcagua

Las prácticas clínicas forman un componente esencial del programa formativo de la carrera de Enfermería, conformando un proceso en el que se aprende desde la propia práctica y que requiere de un hábito que se adquiere en forma intencionada y en forma secuencial durante todo el proceso de enseñanza-aprendizaje.

Bajo esa premisa y con el propósito de perfeccionar la vinculación con los centros de prácticas a través del desarrollo de una cultura basada en la evidencia, la carrera de Enfermería del Campus San Felipe llevó a cabo una jornada de capacitación centrada en el impacto de la aplicación de las Guías de Práctica Clínica de Enfermería en la calidad del cuidado, encuentro que estuvo dirigido a profesionales de enfermería que se desempeñan en los diferentes servicios y unidades de los recintos hospitalarios y unidades de Atención Primaria de Salud de Aconcagua, además de profesionales que realizan labor de supervisión y tutoría clínica a estudiantes de Enfermería en los distintos niveles del plan curricular.

La actividad, certificada por la Escuela de Enfermería de la UV, contó con la presencia de las expositoras Bruna Espinoza, doctora en Ciencias de la Enfermería y Coordinadora del Programa Guías RNAO de la Escuela de Enfermería de la Universidad de Valparaíso, y la enfermera coodinadora del Programa RNAO-Minsal de Buenas Prácticas Clínicas del Hospital San Borja Arriarán, Bárbara Ampuero.

“En el actual contexto sociosanitario cambiante y complejo, los profesionales de enfermería deben saber tomar decisiones allí donde les compete actuar fundamentados en la mejor evidencia generada por la investigación para otorgar un cuidado humanizado, seguro y eficiente, de acuerdo con las necesidades de la población en las distintas etapas del ciclo vital de las personas”, señaló la doctora Bruna Espinoza respecto a la importancia de habilitar estos espacios de aprendizaje.

La académica, quien tuvo a cargo la apertura de la jornada con la exposición “Nociones elementales de la práctica basada en la evidencia. Guías de Práctica Clínica de la RNAO”, fue enfática en afirmar que “el proceso de aplicar la mejor evidencia en la práctica del cuidado reviste cambios en la forma de pensar y de sentir el cuidado que se otorga, tanto por parte de las enfermeras/os asistenciales como en las enfermeras docentes, porque en ellas recae la responsabilidad de infundir en los estudiantes la inquietud investigativa a través del desarrollo y aplicación de la competencia de pensamiento crítico-reflexivo que los lleve a plantearse preguntas y a desarrollar las competencias en la búsqueda de información relacionadas con el cuidado, como también en desarrollar una cultura de autoevaluación permanente de su quehacer”.

En encuentro continuó con la ponencia de Bárbara Ampuero titulada “Programa Guías Clínicas de la RNAO. Plan Piloto Minsal. Implementación-Mantención-Evaluación-Seguimiento. Impacto de la aplicación de las guías en la Gestión del cuidado de Enfermería”, oportunidad en que la profesional pudo compartir su experiencia a cargo de la coordinación del Programa RNAO-Minsal de Buenas Prácticas Clínicas del Hospital San Borja Arriarán, relevando el trabajo que se desarrolla tanto en los ámbitos clínico y académico, y cómo ambos se conjugan en beneficio de la salud de los pacientes.

RNAO

La Registered Nurse Association of Ontario, RNAO, es una asociación de profesionales de Enfermería, titulados, practicantes y estudiantes de Ontario (Canadá) que desde 1925 promueve una política de salud pública basada en la excelencia del ejercicio de la Enfermería y que el año 1999 lanzó el programa de directrices sobre mejores prácticas en colaboración con el Ministerio de Salud de ese país. En la actualidad el programa es reconocido internacionalmente por su excelencia, desempeñando un rol de liderazgo en el desarrollo de las buenas prácticas clínicas.

“Hace dos años, el Minsal suscribió un convenio con la RNAO para trabajar en conjunto con estas guías de buenas prácticas clínicas, implementándolas en seis hospitales públicos del país con el propósito de fortalecer la atención entregada a la población a través de mejor salud y calidad de vida", afirmó Ampuero, quien desde su rol estratégico en San Borja Arriarán aclara que el principal objetivo en un plazo de tres años es conseguir la acreditación como centro comprometido de la excelencia de los cuidados y extender esas guías al resto de los establecimientos públicos de salud.

Respecto a la evaluación del proceso, la profesional señaló que “en la implementación de estas guías hemos logramos estandarizar los cuidados a nivel de los seis hospitales involucrados en el programa, desarrollando normativas que afectarán a todo el país y generando medición de indicadores que han producido un impacto en relación a la notificación de eventos en nuestro hospitales”.