Académica Rommy Álvarez dialogó con el juez supremo Carlos Calderón.
Acerca del daño en las relaciones familiares y cómo se ha ido avanzando hacia la heterogeneidad del fenómeno familiar, fue entrevistada profesora de la Escuela de Derecho de la Universidad de Valparaíso Rommy Álvarez en el programa “Derecho Civil en el día a día” del canal de televisión abierta del Poder Judicial del Perú.
En la instancia, la académica del departamento de Derecho Civil dialogó con el juez supremo Carlos Calderón, quien inició la actividad preguntando acerca de las familias actualmente, respecto a lo cual la profesora indicó que existe una diversidad de familias, explicando que “muchos hemos escuchado que en nuestra terminología jurídica se empieza a superar la idea de referirnos al derecho de la familia, para pasar ahora a una noción más moderna y amplia en sociedades plurales, a hacer referencia al derecho de las familias, en atención a esa heterogeneidad del fenómeno familiar”.
“Los fenómenos que estamos viviendo en nuestras diversas sociedades son transversales. Por una parte, nos encontramos con el reconocimiento de los derechos esenciales de las personas, independientemente del grupo en que nos encontremos, y entendiendo que la familia es ese grupo fundamental de la sociedad, que tiene que estar al servicio de las personas que son miembros, hay ahí una directa relación. Eso nos hizo salir de la lógica de que la familia base y arquetípica era aquella sustentada en el matrimonio, con una visión bastante patriarcal en su estructura. El desarrollo de la historia desembocó en este reconocimiento de los derechos esenciales de las personas y particularmente dentro de las familias. Por otra parte, los avances tecnológicos y científicos han jugado un rol fundamental para ir entendiendo y desarrollando distintas posibilidades de constituir familias”, subrayó.
Explicó que todos aquellos elementos “confluyen para que ahora podamos entender que ese modelo clásico y tradicional de familia va mutando y se va abriendo, y en las relaciones personales que se van constituyendo en nuestras sociedades también tienen cabida otras alternativas”.
Consultada acerca de la imprescriptibilidad del daño, detalló que “en el sistema chileno se cuenta desde el hecho ilícito, desde que se provocó el daño. Ahí se abre un tema interesante sobre otra clasificación de los daños en el sentido de su aparición, porque hay daños que son continuados y otros que, si bien se produce el hecho ilícito, no existe una constatación del daño en forma inmediata, sino que con posterioridad, y esas figuras son bastante relevantes”.
“Por ejemplo, cuando se omite el reconocimiento de paternidad o maternidad de un hijo, estamos en presencia de un daño continuado y especificidades del daño que se está provocando con esta situación que incide en el derecho a la identidad, que pueden ser niños, niñas o adolescentes, pero en la medida en que van creciendo después van a ser adultos. Entonces, si esto uno lo vincula dentro del ámbito de la familia, obviamente el hijo tiene derecho a que su filiación sea determinada conforme su realidad biológica, y una vez que eso se produce mediante la acción judicial correspondiente, es ahí el minuto donde podemos iniciar el cómputo del plazo de la prescripción”, puntualizó.
El registro completo de la entrevista se puede ver en: https://bit.ly/3w4jkQl
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