El valioso material será utilizado para actividades educativas y de difusión del centro.
El Centro Interdisciplinario de Neurociencias de la Universidad de Valparaíso (CINV) recibió la donación de dos modelos tridimensionales del cerebro humano, diseñados a una escala diez veces mayor que uno real.
Se trata de un valioso material para el estudio y la difusión del conocimiento en la comunidad en general, dado que permite observar las estructuras cerebrales desde varias posiciones. De esta manera, se pueden ver claramente la corteza de cíngulo, el hipocampo, el cuerpo calloso, la hipófisis, la sustancia gris y también la blanca, junto a las diferencias y las respectivas ubicaciones de estas estructuras.
La donación fue realizada por el odontólogo y profesor de neuroanatomía Manuel Jeria, quien actualmente está retirado de la academia, pero que en sus casi cincuenta años de docencia utilizó estos modelos para que sus estudiantes alcanzaran un aprendizaje más efectivo en el campo de la anatomía.
Las unidades desmontables, que fueron fabricadas en madera por el propio profesor Jeria, destacan por el detalle y la congruencia de las partes confeccionadas a escala mayor, que alcanzan una gran verosimilitud.
Tal como lo explica el profesor Jeria, la decisión de donarlo al CINV la tomó por el vínculo emocional que mantiene con la Universidad de Valparaíso, su alma máter, dado que estudió la carrera de Odontología cuando era Universidad de Chile sede Valparaíso.
El gestor de la iniciativa, quien además es magíster en Educación Universitaria, reconoció que comenzó a confeccionar estos modelos para mejorar la forma de enseñar neuroanatomía y fueron muy útiles para el aprendizaje de sus estudiantes. A lo largo de su carrera alcanzó a elaborar más de treinta modelos.
“Creo que hay que ser generoso en la vida y en vez de tenerlos en mi bodega prefiero donarlos para que otros le puedan dar un mejor uso. Mi objetivo fue mejorar la forma de enseñar y logré buenos resultados. Cuando a uno le apasiona lo que hace, busca siempre nuevas formas para ir mejorando. Esa es la razón, un poco idealista, de por qué estamos aquí en el CINV. Espero que les sirvan para seguir desarrollando el conocimiento científico y, a su vez, hacerlo más accesible a las personas”, afirmó.
Agregó que “nunca había venido al CINV. Estoy muy agradecido. Conocía al doctor Ramón Latorre, quien es un idealista, un creador y un intelectual de la ciencia. Me voy más que conforme”.
Desde el CINV agradecieron la iniciativa y valoraron positivamente la donación, ya que lo consideran un valioso material para la difusión de la ciencia en la comunidad.
El CINV tiene una alta productividad científica de impacto, con un reconocido prestigio internacional. Además, cuenta con un área de educación y difusión muy activa, que abarca documentales, libros, pasantías, conferencias y también presencia en ferias científicas y actividades de divulgación, que permiten que la ciencia llegue también a la comunidad. Por lo tanto, este tipo de elementos ayudará a que más personas tengan acceso a un material y conocimiento que normalmente no es muy asequible.
La donación fue recibida por los directores del CINV, Ramón Latorre y Juan Carlos Sáez.
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