Participan 43 jóvenes, alumnos de cuarto medio de establecimientos municipales de Valparaíso, Quilpué y Limache.
Este martes se dio inicio a la segunda versión del programa Propedéutico de la Universidad de Valparaíso. La ceremonia fue encabezada por el rector de la casa de estudios, Aldo Valle, y el alcalde de Valparaíso, Jorge Castro, junto a autoridades académicas y de la educación municipal porteña, de Quilpué y Limache.
El programa Propedéutico es una iniciativa destinada a dar acceso equitativo a la educación superior. Está abierto a alumnos de cuarto medio de liceos municipales, provenientes de contextos vulnerables, y que presentan desempeños académicos destacados.
Los 43 alumnos que este año participan en el Propedéutico pertenecen a los siguientes establecimientos educacionales: Liceo Pedro Montt, Liceo Técnico Femenino de Quilpué, Liceo Matilde Brandau de Ross, Liceo Eduardo de la Barra, Instituto Marítimo, Liceo Barón, Liceo Alfredo Nazar, Liceo María Luisa Bombal, Liceo María Frank McDougall, Liceo Artístico Guillermo Gronemeyer, Liceo Comercial Alejandro Lubet Vergara A-40, Liceo de Limache, Instituto Superior de Comercio Francisco Araya Bennett, Liceo Manuel Montt y Liceo Matilde Brandau de Ross.
Vías de acceso no tradicionales
Para José Miguel Salazar, director de División Académica de la UV, el inicio de esta segunda versión del Propedéutico es una ocasión especial. “Es la posibilidad de demostrar que lo que comprometimos en la primera versión del Propedéutico se materializó, que tenemos unos estudiantes que progresan en la universidad, y que la universidad como tal puede ofrecer a la comunidad vías de acceso que no son las tradicionales para estudiantes meritorios, que están en escuelas que a lo mejor no hubieran considerado a la Universidad de Valparaíso como una primera opción, pero que hoy día están muy interesados en venir”, afirmó.
Asimismo, indicó, “la convocatoria que hemos tenido en términos de la postulación de estudiantes que han decidido confiar en nuestro Propedéutico, es bien significativa, y por lo tanto estamos muy optimistas sobre el desarrollo de este proceso en el largo plazo. Creo que nos va a ayudar mucho a diversificar nuestro cuerpo estudiantil, traer experiencias de vida diferentes a la universidad, y cumplir bien el rol de la universidad pública, en el sentido de poner gente de distintas trayectorias a conversar, a vivir juntos, a conocerse mejor, y al mismo tiempo formarse como buenos profesionales. En ese sentido, creo que esta es una iniciativa ante la cual tenemos muchas esperanzas, y que debería seguir creciendo en los años que vienen”.
Una fiesta
La académica Suyén Quezada, directora del programa Propedéutico, fue la encargada de dar la bienvenida a los nuevos alumnos. Destacó que este programa “significa para la universidad un gran avance en términos de equidad y en términos de ofrecer el espacio público hacia los establecimientos públicos, con una alianza que se va consolidando cada año”.
La profesora enfatizó que este año “nuevamente estamos trabajando un convenio de cooperación con la Municipalidad de Valparaíso, y ahora se suman las municipalidades de Quilpué y de Limache. Por lo tanto, para nosotros es estar de fiesta hoy, con 43 estudiantes que ingresarán a la Universidad de Valparaíso”.
Suyén Quezada dijo a los alumnos que el camino que recorrerán de aquí a fin de año no es sencillo ni fácil, sino de alta exigencia y responsabilidad, pero que a su término demostrará que los jóvenes provenientes de la educación pública sí son capaces de tener éxito, más allá de la PSU.
Resultado satisfactorio
La ceremonia consideró una alocución de Dania Silva Moraga, alumna de la promoción 2013 del Propedéutico, hoy estudiante de la carrera de Administración Hotelera y Gastronómica en la UV. La joven, que estaba embarazada cuando se inició el programa, destacó el apoyo que encontró en su promoción, a la que llamó “familia propedéutica”. Explicó que en ocasiones el camino se le hizo pesado, pero aprendió a ser perseverante y supo que el esfuerzo tiene recompensa. Invitó a los jóvenes de esta segunda versión a perseverar y seguir sus sueños, porque “el equipo Propedéutico los respalda: ustedes no están solos”, enfatizó.
Los estudiantes del Propedéutico recibieron una mochila con útiles, que representa el inicio de esta nueva e importante etapa de sus vidas.
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