Académica de la carrera de Nutrición y Dietética hace un llamado a los padres para que se procupen de los alimentos que sus hijos llevan al colegio.
En Chile 3 de cada 10 niños son obesos o tienen algún grado de mal nutrición en exceso. En otras palabras, cerca del 30 por ciento de los menores presentan esta condición.
Ximena Palma, académica de la carrera Nutrición y Dietética, ve con preocupación el actual escenario, dado que muchos de estos niños si no cambian sus hábitos alimenticios, finalmente se convertirán en adultos enfermos de hipertensión, diabetes y eventualmente con algún tipo de deficiencia cardiaca o hepática.
Además, la nutricionista advierte que un niño que se alimenta mal va a rendir poco en las actividades escolares y en los estudios, además se va a sentir cansado y de mal humor.
Comer solo lo que necesita
En muchos hogares la colación a media mañana es parte importante de la alimentación diaria de los escolares. “La colación -en su definición- es una porción de comida (o una comida de tamaño reducido) que tiene la función de mantener los niveles energéticos durante un periodo de tiempo, que pudiese ser superior a las cuatro horas (que ocurre cuando los escolares están en clases)”, explicó la experta.
“En ese sentido, es muy importante tener una colación a media mañana, porque esta aportará la glucosa y otros nutrientes que son fundamentales para mantener la concentración y poder rendir en los estudios”, agregó.
“Si eliges una manzana, al contener fibra la glucosa va a llegar de manera más parcializada a la sangre y tendrás el combustible necesario para tu cerebro y no vas a requerir consumir nuevos alimentos en un lapso moderado de tiempo. De manera opuesta se comporta el azúcar común, ya que, si bien se digiere en glucosa, este proceso lo hace en forma más rápida y en poco tiempo vas a necesitar consumir un nuevo alimento, aumentando la ingesta”, aseguró.
Recomendaciones
Ximena Palma dice que si pretendemos preparar colaciones saludables, las recomendaciones son las siguientes: elegir principalmente alimentos naturales. Tratar de evitar los productos procesados, porque generalmente son ricos en calorías, azúcar y en grasas, sobre todo las llamadas saturadas.
“La primera recomendación va por ese lado. Y a qué nos referimos con alimentos saludables, a aquellos como la fruta fresca. Si vas a preparar un sándwich preferir pan integral e incorporar verduras (tomates y lechuga por ejemplo) y un quesillo o queso fresco, bajo en grasa, en vez de agregar un queso más maduro (amarillo). Siempre tratamos de recomendar alimentos que sean poco procesados. En el caso de los lácteos un yogur o una leche descremados. Mucha gente les compra a los hijos colaciones como las cajitas de leche saborizadas individuales, pero numerosas de ellas tienen bastante cantidad de azúcar. Si bien la mayoría son semidescremadas, no obstante tienen una adición de azúcar importante. Entonces el consejo también es revisar las etiquetas y elegir las que tengan un menor contenido de nutrientes críticos (sodio, azúcar y grasas saturadas)”, aconseja la especialista.
Finalmente, la especialista advirtió que no es recomendable intercambiar las comidas y consumir solo colaciones durante la jornada escolar (sin almuerzo), ya que es altamente probable que el apetito que se genera por el bajo aporte calórico que entregan las colaciones, se termine consumiendo el doble de la ración que se debiera ingerir a la hora de almuerzo, una vez que se regresa a casa.
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