Ocho jóvenes con Síndrome de Down realizaron su práctica en las escuelas de Fonoaudiología y Tecnología Médica.
Esta semana concluyeron su práctica laboral en las escuelas Fonoaudiología y Tecnología Médica de la Universidad Valparaíso ocho jóvenes con Síndrome de Down usuarios del Programa de Tránsito a la Vida Adulta de AVANZA, institución sin fines de lucro de la Quinta Región que promueve la inclusión de personas con discapacidad a través del empleo, para lograr que éstas participen en forma activa y autónoma en la comunidad, como sujetos de pleno derecho.
Se trata de Diego Espinoza, Javiera Gorigoitía, Pía Mongillo, Camila Mansuy, Christopher Fajardo y Esmeralda Vega, quienes, en forma alternada, ejecutaron labores en la biblioteca que comparten ambos planteles, en particular referidas al préstamo y recepción de libros mediante la utilización de un sistema computacional.
A ellos se sumaron Gabriel García-Huidobro y Valentina Iturrieta, a quienes les correspondió realizar labores de aseo y de secretaría, respectivamente.
Los ocho jóvenes reconocieron que la experiencia fue muy interesante y enriquecedora, especialmente para el clima laboral y la relación con los estudiantes, quienes –a su vez- valoraron su cercanía.
Programa especial
Mediante la planificación de actividades y prácticas laborales, los usuarios del Programa AVANZA reconocieron sus capacidades y limitaciones personales en relación al mundo del trabajo, lo que les permitió desarrollar al mismo tiempo habilidades genéricas para el ingreso al mundo del trabajo.
Al respecto, la directora de AVANZA, Bernardita López, sostuvo que el vínculo con entidades académicas es muy importante pues permite que los profesionales del futuro se relacionen con personas en situación de discapacidad desde sus primeros años de formación, en base a un paradigma realmente inclusivo, con enfoque de derechos.
“Nuestro sistema educacional enfoca la intervención para personas en situación de discapacidad en aprendizajes académicos que están poco orientados al desarrollo de autonomía, entregando herramientas que muchas veces son insuficientes para que estas personas se desenvuelvan adecuadamente en la vida diaria y se hagan cargo de sí mismas. Por lo tanto, en nuestra organización tenemos un programa previo al de la inclusión laboral, centrado en el tránsito a la vida adulta, en el que se refuerza el desarrollo de este tipo de habilidades funcionales, mediante prácticas laborales y otras actividades, facilitando la inclusión del individuo no sólo en su entorno laboral sino que a la vez en su entorno social”, explicó la directora.
La alianza colaborativa entre AVANZA y la Universidad Valparaíso data del 2014, año en el que por primera vez usuarios de esa institución realizaron su prácticas laborales en la casa de estudios.
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