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Editorial UV presenta la poesía “pensante y musical” de Aramís Quintero

25 Agosto 2016

Lanzamiento de “El humo y sus prodigios”, del autor cubano residente en Chile, se realizó en la librería Ulises Lastarria.

Aunque la tardea estaba fría, los altos estantes pletóricos de literatura de la librería Ulises Lastarria junto a un público atento y entusiasta le aportaron la calidez necesaria al lanzamiento en Santiago del libro de poemas “El humo y sus prodigios”, del escritor cubano y residente en Chile Aramís Quintero. Publicado por la Editorial UV, se trata de un proyecto financiado por el Fondo Nacional del Libro y la Lectura (convocatoria 2015) del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes.

Para la casa editorial de la Universidad de Valparaíso, la calidad literaria de este autor ha sido un feliz descubrimiento. Y así lo destacó el director de Editorial UV, Cristián Warnken, durante la presentación de la obra. “De tanto leer, de pronto uno empieza a perder el asombro. Pero cuando leí un primer poema de Aramís Quintero, me vino como una bocanada de aire, de verbo, era una fiesta del lenguaje y también era algo completamente nuevo respecto de lo que estábamos leyendo y editando hasta ese momento”, comentó.

Por eso, no dudó en calificarlo como un “poeta extraordinario” que “nos deslumbra y sorprende con este libro de poesía luminosa”. Lo describió como “heredero de una tradición poética cubana ligada íntimamente con la gran cultura europea, que se revela como un artesano prodigioso del idioma, con poemas densos y al mismo tiempo transparentes, una poesía —como dice el prologuista de este libro— ‘pensante y musical’. Desde el mito a lo cotidiano, desde Grecia a Cuba, desde la infancia a la nostalgia, y desde la soledad a la amistad, los versos del poeta son puentes que nos devuelven no sólo a su patria perdida (Cuba), sino a una patria común también perdida, la de la palabra mágica dicha en torno al fuego común”, expresó Warnken.

En la sobria y emotiva ceremonia también participó activamente el escritor Carlos Lloró, quien estuvo a cargo del prólogo del libro (de alrededor de cien páginas). Lloró enfatizó la musicalidad de los versos de Quintero, que son capaces de seguir “resonando” en la mente de quien los lee incluso mucho tiempo después. A su juicio, uno de sus grandes méritos es que “logra un raro equilibrio entre música y pensamiento”.

En la ocasión se leyeron varios poemas de la publicación tales como “Fantasma”, “Ágape”, “Los argonautas”, “El reino” y “El desierto”, que recibieron espontáneos aplausos.

Vivencias y culto a lo clásico

Quintero explicó que la estética del verso y de construcción de los poemas del nuevo libro es diferente a sus anteriores creaciones de poesía para adultos. “Mi poesía anterior, en general, tiende a lo minimalista: poemas relativamente breves y muy concentrados, tratando de emplear la menor cantidad de elementos. Si bien ‘El humo y sus prodigios’ no es un libro de desbordamiento y sigue siendo ceñido, necesitó de versos más largos y de poemas más extensos para poder fluir y abarcar sus motivos. Estos son más ambiciosos, porque involucran sobre todo mucha referencia a la cultura clásica, que para mí es muy querida”, dijo.

La principal fuente de inspiración para el escritor es su propia vivencia, “mi manera de digerir el entorno, el tiempo que me tocó, necesidades de tipo íntimo. Todos los motivos son estrictamente personales en relación con el medio y con mis propios procesos de reflexión, de meditación”. Entre los autores que más lo han marcado, mencionó especialmente al poeta cubano Eliseo Diego y al argentino Jorge Luis Borges.

El poeta vive en Chile desde 1999, pero nunca ha perdido la conexión con sus raíces en Cuba. Su vida en ambos países, afirmó, “está inmersa en este libro”. Uno de los poemas predilectos de su nueva creación es “Caza Perdida” y también “Todo dio un vuelco”, el cual considera más biográfico.

Según Lloró, “los poemas de ‘El humo y sus prodigios’ parecen ser piezas severamente articuladas de una maquinaria gótica en construcción. Su gótico es un barroco translúcido”. A su juicio, “el cubano Quintero ha venido a ocupar uno de los lugares vacantes en el canon poético chileno” y su aporte es “nada menos que el ADN de un poeta de raza, plenamente consagrado a su oficio”. En parte del prólogo subraya, además, las influencias literarias y las características de su poesía. “Pocos autores se han apoyado en Borges para tejer su poesía. Quintero, en este como en otros aspectos, es una lujosa excepción. Su poesía es pensante y musical –resonante- en grado sumo; también elegante, respetuosa y emotiva”.

Más de 20 obras

Aramís Quintero Segovia (Matanzas, Cuba, 1948), poeta, narrador y ensayista cubano residente en Chile. Se licenció en Lengua y Literaturas Hispánicas en la Universidad de La Habana. Su obra publicada abarca más de veinte títulos (literatura para adultos y para niños y jóvenes), varios de los cuales han sido premiados en su país y el extranjero. En Cuba, el Ministerio de Cultura le otorgó la distinción «Por la Cultura Nacional» y, entre otros galardones, recibió el Premio Nacional de la Crítica 1997 por su libro “La sal estricta” (poesía), y en 1998 por “Imágenes” (poesía para niños). En Chile recibió el Premio Marta Brunet de poesía para niños 2003 por su libro “La tarde es una manzana”.

Parte de su obra ha sido recogida en numerosas antologías de Cuba y otros países. Figura en el Gran Diccionario de Autores Latinoamericanos de Literatura Infantil y Juvenil (SM).

Estuvo a cargo del libro “Poesía y prosa selectas” de Eliseo Diego (1991). Es miembro fundador de la Corporación Lectura Viva, dedicada a la capacitación de mediadores de lectura en todo el país.