“Hay que hacer una guerrilla QR para crear conciencia”, dice Matías Cortés, estudiante de Ingeniería Civil Informática.
Una productiva estadía en el parlamento brasileño tuvo Matías Cortés, estudiante de Ingeniería Civil Informática UV, luego de haber ganado el Primer Hackathon Legislativo Mundial realizado en Chile con su aplicación en versión web y móvil, orientada a implementar los códigos QR en las leyes, llamada E-Parliament.
Según comenta Matías la experiencia fue enriquecedora. “Lo que hicimos con el código QR en Chile allá agarró más fuerza. En nuestro país una persona ve el número, lo pone en la aplicación y listo, pero en Brasil para ver una ley la persona tiene que atravesar tres campos y es mucho más complejo, entonces unificar todo eso en un código QR les encantó y cobró mucha más relevancia”, explica.
Durante su estadía, Matías pudo conocer el trabajo que se realiza al interior del hacklab del parlamento brasileño. “Es un laboratorio hacker que está constantemente experimentando nuevos formas de acercar a la ciudadanía en el tema legislativo. Pudimos conocer los últimos avances en esta materia, como la iniciativa de acercar las leyes a la gente a través no del lenguaje escrito, sino de imágenes y video, junto con el establecimiento de un rango de los políticos menos coherentes al más consecuente entre el discurso y las votaciones”, asegura.
“Vamos a seguir profundizando esta iniciativa, el vínculo con el hacklab de Brasil sigue activo, es grandioso para nosotros, porque disponemos de todo ese equipo de trabajo y gracias a internet la distancia no existe. Tenemos un mini equipo acá, pero estar indexado con Brasil es un respaldo importante para seguir trabajando”, asegura.
Prototipo funcional
En cuanto a la aplicación E-Parliament, el estudiante indica que “es un prototipo funcional, hay que validarlo y estamos trabajando en su operatividad. En Brasil están muy interesados en los códigos QR, pero es muy difícil ir a hablar con un político para que indexen estos códigos cuando se impriman las leyes”.
“Sería necesario hacer una guerrilla QR en el buen sentido del término, es decir, nosotros imprimir los códigos y ponerlos en algunas partes, para crear conciencia, pero la parte de imágenes y videos es potente y se va seguir trabajando. Se pretende hacer una inteligencia social que no necesite personas monitoreando las imágenes que se estén poniendo, sino que las mismas personas puedan poner un like o una advertencia de que es una imagen peligrosa para verificar, mientras más likes queda más a la vista y las con menos, se quedan atrás”, señala.
Respecto de los futuros proyectos que pretende desarrollar, Matías agrega que “se requiere crear leyes con lenguaje no tan técnico, es difícil porque puede tener muchas interpretaciones, pero es necesario bajar las leyes al ciudadano común, por eso hay que entender que el hacklab es un laboratorio donde se están experimentando cosas, se están probando, las que funcionan se implementan, pero no hace nada más, el parlamento les paga para experimentar y ahí radica su importancia, va mucho más allá de la informática ya que es un equipo multidisciplinario”.
Sobre su experiencia el estudiante añadió que “fue muy relevante el viaje y compartir con otra cultura, la mentalidad que tienen para trabajar es distinta, a pesar de tener problemas no se les viene el mundo encina, el ambiente laboral es genial, tienen mucha libertad. Chile es el país que más horas trabaja y el que menos produce, porque somos demasiado estructurados, no tenemos esta flexibilidad, ellos producen igual o mucho más que nosotros”.
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