Evento organizado por la Escuela de Arquitectura UV reúne a estudiantes de Chile y el extranjero.
Una cartera de proyectos para la Tornamesa del sector de Barón es el objetivo del Workshop de Arquitectura Valparaíso Extremo New Wave, organizado en conjunto por la Escuela de Arquitectura de la Universidad de Valparaíso y el Grupo de Investigación Paisaje Cultural de la Universidad Politécnica de Madrid.
Durante una semana, estudiantes de arquitectura chilenos y extranjeros trabajarán en el Parque Cultural de Valparaíso junto a destacados profesionales para levantar diversas propuestas, las cuales serán evaluadas por un jurado experto, liderado por la arquitecta portuguesa Fátima Fernandes.
El futuro de la ciudad
Carlos Lara, secretario de la Facultad de Arquitectura UV, explicó que “el objetivo de la actividad es darle una mirada a un lugar específico con propuestas que los estudiantes puedan hacer en una semana, que serán un regalo para la ciudad. Además los alumnos de todas las escuelas podrán tomar contacto con una realidad distinta, lo que a veces no es tan sencillo”.
Lara agrega que “uno de los aspectos fundamentales del Workshop es mantener y potenciar el trabajo conjunto con el Grupo de Investigación Paisaje Cultural de la Universidad Politécnica de Madrid, porque permite tener una visión distinta de lo que queremos hacer con nuestras ciudades”.
Mientras que Marco Ávila, director de la Escuela de Arquitectura UV, señala que “la Tornamesa es un área que constituye una serie de factores que inciden en el futuro de Valparaíso, como crecimiento portuario y acceso a la ciudad. En torno a ese sector los estudiantes deben generar un banco de proyectos, en el rango de establecer lecturas y estudios propios de la academia, pero que también se desmarcan de la contingencia, abriendo futuros posibles, imaginarios y utópicos”.
Valparaíso como laboratorio
El arquitecto Javier Ruiz, integrante del Grupo de Investigación Paisaje Cultural de la Universidad Politécnica de Madrid y encargado de dictar la conferencia “Paisajes imaginados, paisajes posibles”, indicó que “Valparaíso es un laboratorio, un espacio para pensar, un lugar de reflexión absolutamente privilegiado, es el espacio de una intervención modélica, que probablemente no podríamos imaginar de mejor manera para intervenir”.
“Valparaíso es un espacio vivo, está cambiando permanentemente. Lugares como la Tornamesa, que está en desuso, los vamos a encontrar permanentemente, es la forma en que la ciudad cambia y evoluciona. Esta relación entre el espacio y el tiempo es fundamental, el workshop busca concebir el paisaje como una síntesis de ambas. Este lugar tiene un pasado, tiene un presente y probablemente también tiene un potencial de futuro, se trata de sintetizar esa idea de tiempo en el espacio”, aclara.
Diversas soluciones para un problema
Otro de los invitados a exponer en el Workshop fue el arquitecto Gustavo Crembil, académico del Rensselaer Polytechnic Institute, de Nueva York, para quien la invitación a participar “es un halago por la posibilidad de conocer y trabajar en contextos de un tipo de paisaje del cual no estamos familiarizados y de problemas que no nos son comunes”.
Crembil, quien viaja junto a un grupo de sus estudiantes en una gira por Sudamérica, añade que “el trabajo que propone este Workshop es una oportunidad de intercambio, de confrontar estudiantes de diferente formación, que tienen la oportunidad de entender que la arquitectura y el urbanismo no son uno, sino que cada lugar piensa de modo de diferente. Comenzar a entender que un mismo problema puede tener distintos modos de abordarlo, puntos de vistas muy tangenciales e incluso contradictorios, permite entender la realidad de una manera diferente”.
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