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Con distinción máxima se graduó primer doctor en Derecho UV

05 Enero 2017

Se trata del abogado Juan Ignacio Vásquez Caces, quien defendió su tesis doctoral obteniendo nota 7,0.

Con éxito defendió su tesis doctoral el primer graduado del Doctorado en Derecho de la Escuela de Derecho de la Universidad de Valparaíso, abogado Juan Ignacio Vásquez Caces.

El primer doctor en Derecho de la UV manifestó que, a sus 53 años, “transformarme en doctor es el cumplimiento de un anhelo académico largamente postergado. Soy ex alumno de la Escuela de Derecho de la UV, de la que fui premiado como el mejor egresado y el mejor licenciado de mi promoción. He desarrollado una extensa labor pedagógica universitaria, aunque lamentablemente no en mi alma mater, y la obtención del grado de doctor es una condición que, sin duda, mejora mi posición docente”.

Agregó que “me resulta muy significativo ser el primer doctor de esta institución, en circunstancias que en esta Escuela me formé profesionalmente en la correspondiente etapa de pregrado. Supongo que este antecedente es también simbólico para la propia Universidad, porque implica que ahora puede considerarse capaz de impartir docencia en los más altos niveles de graduación académica y conducir a sus propios estudiantes a esa situación de privilegio formativo. En otras palabras, no será necesario emigrar a otra universidad para que un estudiante perteneciente a esta misma casa de estudios superiores pueda obtener la totalidad de los grados académicos disponibles en el sistema terciario de educación. Si bien ha sido fortuito constituirme en el primer doctor en derecho de la UV, no puedo dejar de reconocer que me siento halagado y orgulloso de serlo”.

La comisión que se constituyó para evaluar este examen de grado, consistente en la defensa de la tesis de Ignacio Vásquez, titulada “El debate multicultural a la luz de la noción pragmatista de solidaridad”, que constituye un intento de aproximación al tema a partir del discurso pragmatista del filósofo norteamericano Richard Rorty, estuvo integrada por el decano de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la UV, Alberto Balbontín; el coordinador de Postgrado de la Escuela de Derecho UV, doctor José Luis Guzmán; la directora del programa de Doctorado en Derecho UV, doctora Pamela Prado; los profesores de postgrado doctores Agustín Squella y Luis Villavicencio y el profesor invitado de la Universidad de Chile doctor Salvador Millaleo.

Este solemne acto se realizó en la Sala de Consejo Italo Paolinelli de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la Universidad de Valparaíso.

La directora del Doctorado, doctora Pamela Prado, comentó que “nos sentimos muy satisfechos con este primer examen de grado, que demuestra que se trata de un programa que avanza en forma seria y sostenida. El resultado obtenido por nuestro primer doctor en Derecho se une a la nueva acreditación obtenida; ambas noticias nos llenan de satisfacción, a la vez que nos imponen nuevos desafíos, que implican llegar a una etapa de mayor consolidación, no solo a nivel nacional, sino, por ejemplo, proyectarnos más allá de nuestra fronteras, incorporando alumnos de otras latitudes, entre otras múltiples tareas".

Tesis doctoral

La tesis doctoral de Juan Ignacio Vásquez, cuyo título es “El debate multicultural a la luz de la noción pragmatista de solidaridad”, constituye un intento de aproximación al tema a partir del discurso pragmatista del filósofo norteamericano Richard Rorty. El trabajo tiene en cuenta dos cuestiones centrales, según explicó el primer doctor en Derecho egresado de la UV:

“Por una parte, que desde el punto de vista de la tradición liberal clásica el lenguaje de los derechos se articula en función de los derechos subjetivos del individuo, y que dado el carácter universalista de estos derechos, no sería posible suscribir la existencia de derechos colectivos (que, por su especificidad, sólo podrían predicarse de determinadas minorías o grupos sociales, los cuales tendrían una existencia diferenciada e irreductible a la de sus miembros). Además, que según el liberalismo y la concepción atomista, como los derechos humanos individuales y universales constituyen una victoria histórica de la libertad individual en contra del Estado absolutista y de las limitaciones impuestas al individuo por instituciones premodernas, en la sociedad civil moderna no debe existir ninguna mediación institucional o grupal entre el individuo libre y soberano y el Estado”.

“Por otro lado, agregó, a pesar de las ideas del liberalismo tradicional se ha demostrado que la identidad humana se construye dialógica y culturalmente y que la praxis muestra que el goce de los derechos individuales resulta ilusorio en sociedades altamente estratificadas, como las sociedades latinoamericanas (y la nuestra en particular), caracterizadas por complejas fracturas internas que impiden la realización de la igualdad tratándose de las minorías culturales frente a la sociedad mayoritaria o dominante”.

Acotó que “para superar tales impedimentos la tesis entiende que los estados liberales deben propender al reconocimiento de la diversidad cultural sin pretensiones de homogeneización social ni políticas que impongan la asimilación”.

Respecto al programa de Doctorado en Derecho de la UV, Vásquez señaló que “creo que es muchísimo más receptivo a la experimentación y la creatividad. De la conversación con doctorandos de otras universidades aparece un reclamo y un sentimiento de cierta frustración compartidos, a saber, que los muy reducidos marcos teórico-conceptuales que son permitidos en la mayoría de los programas de doctorado en derecho no permiten elegir temas de investigación que autoricen al doctorando a expandir la búsqueda hacia áreas del conocimiento usualmente vedadas para los juristas. En este sentido, mi tesis es propiamente filosófica, si bien toca aspectos de la filosofía del derecho y de la filosofía política. Pero su eje central es propio de la filosofía general”.

Finalmente, respecto al aporte del doctorado para su desempeño profesional, el abogado Juan Ignacio Vásquez dijo que “es un instrumento que fortalece mi capacidad para la búsqueda de soluciones a los problemas normativos a los que me enfrento a diario: como abogado, soy secretario de una comisión legislativa del Senado. Y como profesor universitario, le garantiza a mis estudiantes que soy un académico comprometido y que cree en la formación continua y la responsabilidad docente. Considero que hoy es impresentable que un profesor no sea capaz de mostrar compromiso con su propia formación intelectual”.