Programa de la Escuela de Medicina UV es el primero en Chile en incorporar un proceso de práctica segura con foco en el paciente.
La especialidad de Anestesiología y Reanimación que imparte la Escuela de Medicina de la Universidad de Valparaíso comenzó a aplicar, desde este semestre, una serie de actividades y procedimientos de simulación clínica en la fase de inducción a sus becados.
De esta manera, este programa se transformó en el primero en su tipo en Chile en incorporar un proceso de práctica segura orientado a fortalecer el desarrollo de destrezas técnicas, habilidades específicas y la capacidad de trabajo en equipo de los profesionales de la disciplina, con foco en la atención adecuada y el bienestar de los pacientes.
En términos generales, se trata de una metodología de aprendizaje de alto nivel que permite, después de un plan teórico, familiarizar a los futuros especialistas -desde el inicio de su formación- con su rol en un procedimiento, la realidad inherente a un pabellón quirúrgico, las técnicas particulares que han de ejecutar, los equipos y dispositivos anestésicos a utilizar, el modo de interactuar con los cirujanos e integrantes del equipo de salud y el trato, cuidados y supervisión que deberán dispensar a cada paciente, antes y después de una operación.
“Un aspecto a destacar de esta herramienta es que permite evaluar procedimientos y modos de actuar en ambientes controlados, al tiempo que promueve el desarrollo de las denominadas habilidades blandas. De hecho, hemos incorporado situaciones de manejo de crisis, que son concebidas como espacios en el que cada becado se ve enfrentado a imprevistos o condiciones de emergencia, que como médicos del área sabemos que no se pueden enseñar en teoría, sino que hay que necesariamente experimentar para saber cómo reaccionar de manera oportuna y efectiva, reduciendo así la incertidumbre de experiencias que pueden llegar a ser muy traumáticas para ellos al comienzo”, explicó la jefa de la Cátedra de Anestesiología de la Escuela de Medicina UV y directora de ese programa de especialidad, Anamaría Correa.
Fases del proceso
El proceso de práctica segura de la fase de inducción del programa de especialidad en Anestesiología y Reanimación se realiza en el Centro de Simulación Clínica de la Facultad de Medicina UV.
Según explicó el médico, docente y coordinador de dicho proceso, Cristián Rocco, éste consta de tres estaciones o fases esenciales: evaluación pre-anestésica, intraoperatorio y recuperación.
Durante la primera, el becado entrevista a un paciente pre-estandarizado para conocer sus antecedentes y diseñar un plan anestésico. La segunda, en tanto, corresponde a ejercicios en pabellón, donde éste tendrá la oportunidad de conocer las máquinas y dispositivos a utilizar, y, además, participar en la aplicación de una anestesia general, como parte de un ejercicio en el que también debe interactuar con cirujanos y enfermeras.
Finalmente, la tercera etapa transcurre en una Unidad de Recuperación. Allí el futuro especialista recibe de regreso al paciente asignado para conversar con él, recopilar información y saber cuál es su estado postoperatorio.
“Como todo lo ocurrido en estas fases es grabado, luego los becados pueden observar su comportamiento. Asimismo, son sometidos a reflexiones, como parte de una evaluación final destinada a corregir errores y fortalecer su capacidad para tomar decisiones y resolver problemas. Todo concluye seis meses después con un nuevo ejercicio de simulación”, precisó el doctor Rocco.
Positiva experiencia
La aplicación de simulación clínica en la fase de inducción de esta especialidad fue muy bien valorada por los futuros especialistas.
“Yo imaginaba que íbamos a llegar directo al hospital y a ver pacientes, lo que produce una natural inquietud. Sin embargo, comenzar así nuestra formación nos permite sentirnos más seguros, conocer de mejor manera las características de los ambientes en los que nos vamos a insertar, los procesos en los que trabajaremos y a los docentes. Sin duda ha sido una experiencia excelente”, afirmó Emilia Schlack.
Similar opinión expresó Manuel José Gana, quien calificó la iniciativa como enriquecedora y necesaria para ser un buen anestesista.
“Uno en Medicina ve muchas cosas, pero no todas en profundidad. Así que hay temor por llegar a un mundo desconocido. Esto permite que la experiencia sea mucho más grata. Nos permite conocer cómo es el trabajo real en pabellón, qué maquinas se utilizan y cómo interactuar con el paciente, trabajar en equipo y con el cirujano o enfrentar crisis e imprevistos”, comentó el becado de la UV.
Aporte al sistema
Con la incorporación de la simulación clínica a su fase de inducción, el programa de Anestesiología y Reanimación de la UV ratifica su carácter pionero, ya que fue igualmente la primera en su tipo en Chile en obtener la acreditación por siete años.
Este hecho fue destacado por el decano de la Facultad de Medicina del plantel y presidente de la Asofamech, Antonio Orellana, quien sostuvo que ese tipo de procesos contribuye a la formación de los especialistas de calidad que el país necesita.
De hecho, Anestesiología se encuentra en la lista de las especialidades médicas que mayor brecha presentan en el sistema de salud público, a nivel nacional.
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