Ceremonia de investidura marcó el inicio de las actividades prácticas de quienes integran el primer año de la carrera.
Cuarenta y ocho estudiantes que en la actualidad cursan el primer año de la carrera de Educación Parvularia de la Universidad de Valparaíso fueron investidas con el tradicional delantal verde de la disciplina y la piocha institucional, elementos que a contar del segundo semestre reciben como símbolos del inicio de sus prácticas académicas en diversas organizaciones e instituciones de la Región.
La entrega oficial de estos elementos se concretó durante una ceremonia realizada en el Campus Reñaca, sede de la Facultad de Medicina, la cual fue encabezada por la directora de dicha unidad, Marina Grabivker, quien en la ocasión estuvo acompañada por la coordinadora de Prácticas de la misma, Carola Cacciuttolo. También estuvieron presentes docentes, familiares y amigos de las estudiantes.
En la ocasión, la directora de la Escuela exhortó a las jóvenes que inician sus actividades prácticas a dar lo mejor de sí durante su permanencia en los jardines infantiles, escuelas, colegios, centros de salud familiar y otras instituciones en las que les corresponderá intervenir.
“En esta primera inserción relacionada con su elección profesional lleven sus preguntas, sus inquietudes y todo lo que vayan aprendiendo en sus clases: los fundamentos, el juego, el respeto a la diversidad, los derechos de la infancia, el conocimiento de cómo aprende y se apropia del mundo la niñez. Lleven también sus fortalezas personales, su creatividad, su vocación, su pasión por generar una mejor educación para la infancia”, afirmó la profesora Marina Grabivker.
En la ocasión también expuso la profesora María Fernanda Valenzuela, quien se refirió al desafío que implican las actividades académicas prácticas, que calificó como “un conjunto de vivencias de un aprendizaje enriquecedor y personal”.
A nombre de las estudiantes investidas hizo uso de la palabra la alumna Gabriela Astorga.
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