Skip to main content

“Covid-19 será la causa de la mayor crisis económica y social de la región en décadas”

29 Abril 2020

Afirmó el analista internacional Felipe Muñoz, en coloquio virtual organizado por la Escuela de Ingeniería Comercial de la UV.

Casi ochenta personas, entre estudiantes y académicos, participaron en el coloquio virtual “Covid-19: Análisis de los síntomas de la Economía Mundial”, que fue organizado por la Escuela de Ingeniería Comercial de la Universidad de Valparaíso. Esta actividad contó con la exposición de Felipe Muñoz, académico del Instituto de Estudios Internacionales de la Universidad de Chile.

El profesional sostuvo que el coronavirus (Covid-19) no solo está provocando “una crisis sanitaria, humana y económica sin precedentes en el último siglo”, sino que también “será la causa de la mayor crisis económica y social de la región en décadas, con efectos muy negativos en el empleo, el combate a la pobreza y la reducción de la desigualdad”.

Muñoz enfatizó en la rapidez con que se deterioraron las expectativas económicas globales desde los primeros casos confirmados del Covid-19 en China hasta que se convirtió en una pandemia en marzo/abril de este año, ya que las proyecciones variaron desde un crecimiento del PIB mundial de 2,9% a una caída de entre 3% y 4%, según Bloomberg Economics. De esta manera, se ha visto una clara correlación entre el avance del virus y el retroceso económico.

Las políticas de contención adoptadas por los distintos países, como el distanciamiento social y las cuarentenas extendidas, han buscado ralentizar o detener la propagación del coronavirus para proteger la salud de la población y disponer de la capacidad hospitalaria y de equipamiento para atender a los enfermos. Sin embargo, al mismo tiempo han provocado una serie de efectos adversos en la economía.

En nuestra región, de acuerdo a la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL, 2020), esta crisis se ha traducido en los siguientes problemas: disminución de la actividad económica de los principales socios comerciales, caída en los precios de los productos primarios, interrupción de las cadenas globales de valor, menor demanda de servicios de turismo y aversión al riesgo y empeoramiento de las condiciones financieras mundiales.

Frente a este incierto y complejo panorama, los países han coincidido en otorgar fuertes paquetes de estímulos económicos, tal como ha ocurrido en Chile (medidas que suman casi 17 mil millones de dólares). Sin embargo, Muñoz puso de relieve que las políticas públicas “no solo consideren aspectos económicos (empleo y producción), sino también de género y medioambientales”. Esto último, considerando que la crisis ha golpeado con mayor fuerza a las mujeres -que, por ejemplo, representan más del 70% de quienes se desempeñan en el sector salud- y que, en vez de reactivar la economía a costa del medio ambiente, se puedan “ligar planes de empleo o salvataje industrial al cumplimiento de objetivos de desarrollo sostenible”.

Como ejemplos de medidas regresivas en materia ambiental, Muñoz citó a Estados Unidos, que redujo los estándares de eficiencia energética en automóviles nuevos y suspendió los procedimientos ambientales para empresas afectadas por Covid-19, en tanto que Noruega fijó la suspensión del pago de impuestos por emisión de CO2. Por el contrario, Canadá optó por “medidas verdes” en sus planes y vinculó el plan de empleo a la limpieza de pozos petroleros y de gas en desuso; y Lituania estableció el cofinanciamiento de proyectos de inversión vinculados con el combate al cambio climático.

Fracaso del multilateralismo

El académico de la Universidad de Chile también puso en evidencia el fracaso del multilateralismo internacional para enfrentar la pandemia del coronavirus Covid-19, es decir, se han dado respuestas nacionales a una epidemia global. En ese sentido, se ha observado “falta de coordinación entre los estados, que organizaciones internacionales -como las Naciones Unidas o la OMS- han sido meramente consultivas y que las instancias de integración se han visto superadas por respuestas nacionales, como se ha visto en Europa”, indicó el profesor Felipe Muñoz.

Otro de los riesgos en una economía en crisis, advierte el magíster en Estudios Internacionales de la Universidad de Chile, es que la efervescencia social se convierta en un campo propicio para el despliegue del “populismo”. Al respecto, le preocupa que se ingrese a una etapa de carreras nacionalistas y proteccionistas en los países, como las que se ocurrieron recientemente respecto de los insumos médicos.

Luego de este análisis se dio paso a una ronda de preguntas y de conversación entre el expositor y estudiantes y académicos, entre los cuales se encontraban Juan Egaña, jefe de carrera en el Campus Santiago, el doctor Patricio Herrera, las profesoras Karen Niemann y Mariana Navia, quienes gestaron esta actividad, y la doctora Valeria Scapini.

Consultado sobre cuánto tiempo puede durar esta crisis económica, Muñoz reconoció que es muy difícil proyectar aquello. "Podrían ser meses o años. Va a depender de la evolución de la enfermedad y de la capacidad que tengan los países de trabajar en forma coordinada en una recuperación”, sostuvo.