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Rector Aldo Valle e intendente regional llaman a postular a la gratuidad

17 Noviembre 2017

El pazo final para postular a gratuidad en la educación superior vence este domingo y el trámite se puede realizar por internet.

Un total de 143.637 estudiantes han accedido a la gratuidad de la educación superior y técnica, de los cuales 91.601 son jóvenes que ingresaron el año 2017 a su primer año de carrera y 52.036 son alumnos que ya cursaban alguna carrera en la Educación Superior. A esto se suma que la mayor parte de los beneficiados de la gratuidad son jóvenes que estudian en regiones distintas a la Metropolitana, donde la región de Valparaíso ocupa el tercer lugar, con un 12,4 por ciento de estos estudiantes.

El intendente regional, Gabriel Aldoney; el seremi de Educación, Alejandro Tapia, y el rector de la Universidad de Valparaíso, Aldo Valle, junto a autoridades y directivos de instituciones de educación superior se reunieron con estudiantes y padres de quienes han sido beneficiados con la gratuidad en el Centro Integral Estudiantil de la UV para dar a conocer el proceso de postulación, con el objeto de informar a la comunidad del proceso para el año 2018.

El rector Aldo Valle, junto con agradecer la presencia de los jóvenes y las autoridades, resaltó su compromiso con esta política pública, por su contribución a la igualdad de oportunidades y por darles a los beneficiados la oportunidad de demostrar sus capacidades.

El proceso de inscripción para la gratuidad vence el mismo día de las elecciones presidenciales, el domingo 19 de noviembre. La autoridad universitaria formuló un llamado a los estudiantes a no perder esta oportunidad.

“Es muy importante que los estudiantes se inscriban, porque eso permite acceder a un proceso administrativo más seguro, para así no lamentar que alguien no pueda adquirir este beneficio por dejación, de modo que el llamado que ha hecho el Gobierno, que ha realizado el Ministerio de Educación es a que todos los jóvenes postulen, para que estas políticas se puedan implementar con oportunidad en el año 2018, para evitar la demora de la asignación de los recursos a las instituciones”, sostuvo.

En tanto, el intendente Gabriel Aldoney, a propósito de los jóvenes beneficiados y el relato de una madre de once hijos, dijo que “la educación es un derecho, por lo tanto, a ninguna persona, independiente de su pensamiento, condición social, le puede estar vetada la posibilidad de desarrollarse a través de lo que son los procesos educativos que muchas veces se han transformado en procesos complejos para las familias y con esto Chile está generando la recuperación de lo que fue una larga tradición antes del golpe militar, antes del cual, efectivamente, el Estado garantizaba y desarrollaba políticas públicas en esta materia y el país alcanzó niveles de formación educativo muy importante en América Latina”.

Para la autoridad regional este proceso de gratuidad fortalece cualitativamente el camino para que las condiciones sociales sean más equitativas.

Según el seremi de Educación, Alejandro Tapia, se espera que para el año 2018 la región de Valparaíso incremente su cupo en gratuidad en siete mil estudiantes, pero también depende de otras variables de acuerdo con el mismo proceso.

“Ojalá de todos aquellos que están hablando que están comprometidos con la educación, lo demuestren y validen este paso de avanzar hasta el sexto decil y, entonces, eso cambiaría esa cifra de siete mil nuevos beneficiados”, dijo.

El proceso se realiza completando el Formulario Único de Acreditación Socioeconómica (FUAS), lo que se realiza en internet en los portales www.gratuidad.cl y www.beneficiosestudiantiles.cl.

Los estudiantes deben llenar los formularios con datos verídicos para refrendar el proceso de manera seria. El formulario busca acreditar la situación socioeconómica real de las familias, lo que será contrastado con la base de datos que posee el ministerio.

Damari Oyanedel, estudiante de primer año de Química y Farmacia de la Universidad de Valparaíso, accedió al programa a través del Propedéutico de la institución, y ahora es beneficiaria de la gratuidad.

“Ser la segunda generación que estudia con la gratuidad es un gran orgullo y un triunfo, ya que se avanza en esta materia. Ha sido un sueño estudiar aquí, aunque no ha sido fácil, porque me ha costado bastante este primer año, pero de a poco hay que ir acostumbrándose”, señala la estudiante.