La ceremonia se realizó en el Hotel Conference Town de Reñaca.
Cuarenta nuevos profesionales, correspondientes a los alumnos egresados los años 2016 y 2017, recibieron su certificado de título como administradores hoteleros y gastronómicos. La ceremonia, que se realizó en el auditorio del Hotel Conference Town de Reñaca, contó con la presencia del decano Óscar Fariña; del secretario de facultad, Galo López; del director de la Escuela, Julián Arellano; de autoridades de turismo regional, empresarios hoteleros y gastronómicos, académicos de la Escuela, familiares y amigos de los egresados.
En su intervención, el profesor Julián Arellano señaló la satisfacción personal que siente al ver cumplida una etapa para estos jóvenes que, sin duda, ha sido difícil y compleja, pero que pudo sortearse por el esfuerzo de cada uno de los nuevos pro-fesionales como por el apoyo de familiares y amigos: “A partir de ahora podrán desempeñarse en el área del turismo y la hotelería, en restoranes, instituciones de salud, líneas aéreas, cruceros y empresas. El turismo es una industria en plena ex-pansión, es la que crea más empleos y estimula la economía. Hoy advertimos un crecimiento explosivo respecto de los años anteriores, lo que redunda en un in-cremento del gasto de divisas. Todo lo anterior permite pensar en una auspiciosa proyección de nuestros egresados, nuevos profesionales en el mundo laboral, si consideramos la excelencia de su formación académica, la excelente acreditación de sus estudios y el perfil inclusivo que ofrece nuestra universidad.”
En la ocasión se distinguió a los mejores alumnos de cada una de las dos genera-ciones de egresados, quienes recibieron su diploma de manos del decano de la Fa-cultad y del director de la Escuela. Los mejores alumnos de las respectivas promo-ciones fueron: Pía Ureta Arqueros (2016) y Camila Mansilla Bruning (2017), quienes además recibieron, como es tradicional, una beca del 50% de descuento para con-tinuar sus estudios en el Magíster en Gestión de las Organizaciones, premio entre-gado por la secretaria académica de la Escuela, doctora María Francisca Soto.
Asimismo, se entregaron los Premios al Esfuerzo, que recayeron en Claudia Her-nández Alegre (2016) y Daniela De Martin Vargas (2017). Y finalmente la distinción al Espíritu de la Escuela, representados por los valores de servicio, hospitalidad y ética profesional a las profesionales Constanza Bugueño Duque (2016) y Daniela Candia Figueroa (2017).
En representación de los egresados, Catalina Contreras Carrizo señaló que “el éxito vendrá siempre si es que somos capaces de hacer lo que sabemos hacer o lo que más amamos hacer”. Agradeció a los académicos, funcionarios y compañeros por haber brindado estos maravillosos años de vida en la Escuela.
El decano señaló que “esta generación está llamada a ser el aporte que nuestra región y país necesita en una industria que se complejiza y se vuelve más exigente, que requiere miradas integrales que involucren el desarrollo de un alto nivel de conocimientos y técnicas disciplinares, pero, por sobre todo, miradas y prácticas que puedan incorporar herramientas de la gestión innovadoras con el apoyo de los recursos tecnológicos adecuados. Como si fuera poco, hemos asumido la formación de jóvenes profesionales inspirados en los valores de la participación, la solidaridad, la equidad, el pensamiento crítico y el respeto a la diversidad, agregando a ello la promoción de habilidades como trabajo en equipo, emprendimiento y la innovación como sello indeleble de una universidad pública, inclusiva y de excelencia como la nuestra. Elementos fundamentales reconocidos”. Finalizó deseándoles éxito a los nuevos profesionales en el rumbo que sus vidas tomarán a partir de este momento.
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