Neurobióloga de la UV inauguró jornadas científicas de biología en Argentina y será parte de la organización de un simposio internacional sobre infertilidad
Kathleen Whitlock, del Instituto de Neurociencia de la UV, participó activamente en las XXVII Jornadas Anuales de la Sociedad Argentina de Biología, donde dictó la conferencia inaugural, asistió a diversas actividades científicas y fue convocada para organizar un debate internacional sobre hormonas de la pubertad y fertilidad.
Con una conferencia inaugural y una agenda cargada de intercambios científicos de alto nivel, la doctora Kathleen Whitlock, académica del Instituto de Neurociencia de la Universidad de Valparaíso e investigadora del Instituto Milenio Centro Interdisciplinario de Neurociencia de Valparaíso, fue una de las figuras centrales de las XXVII Jornadas Anuales de la Sociedad Argentina de Biología: “Evo-devo como abordaje complejo de la evolución biológica", realizadas en el Instituto de Biología y Medicina Experimental de la Universidad de Buenos Aires.
Durante tres días, entre el 3 y el 5 de diciembre, el encuentro —considerado uno de los más relevantes del Cono Sur en el ámbito de la biología— congregó a más de un centenar de científicas, científicos y estudiantes, quienes participaron en conferencias, simposios, mesas redondas y presentaciones de pósteres dedicadas a analizar los principales avances en biología, fisiología y disciplinas afines.
En ese contexto, la doctora Whitlock fue la encargada de inaugurar oficialmente las jornadas con la charla titulada “Evolución y desarrollo del sistema sensorial olfativo: una interfaz neuroendocrina inusual”.
Esta presentación ofreció una mirada retrospectiva de su trabajo científico, que ha permitido proponer no solo un nuevo modelo sobre el desarrollo del sistema sensorial olfativo, sino también una nueva explicación sobre el origen de las células que liberan hormonas gonadotrópicas, que son esenciales para el inicio de la pubertad en todos los vertebrados.
A lo largo del evento, la investigadora asistió a presentaciones sobre toxicología ambiental y cánceres asociados a perfiles endocrinos, así como a mesas redondas y seminarios liderados por académicos y jóvenes investigadores. “Me interesaba escuchar distintas miradas, conversar con estudiantes y conocer qué se está investigando en otros países. Fue una experiencia muy enriquecedora”, comentó.
Finalizado el encuentro, la académica participó el sábado 6 de diciembre en el simposio satélite de la Sociedad Panamericana de Neuroendocrinología (PANS), asociado a la Sociedad Argentina de Biología. En esa instancia presentó resultados recientes del trabajo de su laboratorio, desarrollados junto a su estudiante de doctorado, Eugene Tine, durante la charla titulada “Hormona liberadora de gonadotropina en pez cebra (Danio rerio): compensación ambiental frente a la pérdida genética y un posible sistema olfativo de entrada”. En su exposición, dio a conocer un modelo innovador que demuestra cómo, en peces cebra, hormonas presentes en el agua pueden compensar la ausencia genética de una hormona clave para la reproducción, activando procesos reproductivos. “Es un modelo muy novedoso, que desafía ideas establecidas y abre nuevas preguntas sobre cómo entendemos la pubertad y la fertilidad”, señaló.
En este simposio la participación de Kathleen Whitlock no solo visibilizó el trabajo que se desarrolla en la Universidad de Valparaíso en neuroendocrinología, sino que también abrió un debate internacional sobre el estudio de la infertilidad humana.
La presentación de enfermedades humanas asociadas, dio paso a un intenso debate científico durante una de las sesiones, en que la doctora Whitlock planteó una posición crítica frente a la interpretación dominante sobre el origen de las neuronas que controlan la pubertad. “Nuestro modelo demuestra que estas células no provienen de la nariz, como se ha sostenido por años, sino de precursores del hipotálamo y de la cresta neural. Esto tiene implicancias directas para comprender enfermedades humanas, como ciertos tipos de infertilidad”, afirmó durante la discusión.
El intercambio generó gran interés entre los asistentes y motivó que el doctor Michael Layman, editor jefe de una de las principales revistas internacionales en neuroendocrinología, propusiera la organización de un simposio internacional —on line— para profundizar en estas dos líneas de investigación contrapuestas. La doctora Whitlock fue invitada a integrar el comité organizador de este encuentro, que se proyecta para los próximos meses y reunirá a especialistas de Estados Unidos, Argentina y otros países. “La idea es poner los datos sobre la mesa y discutir, desde una perspectiva evolutiva, cuál modelo explica mejor la biología humana y las enfermedades asociadas”, explicó.
La doctora Whitlock evaluó de manera muy positiva su participación en estos encuentros científicos: “Argentina tiene una larga historia en endocrinología, y para mí fue muy valioso participar, porque nosotros trabajamos en neuroendocrinología, un campo que dialoga directamente con muchas de las líneas que se presentaron en ambos congresos”, explicó la investigadora.
Divulgación científica con impacto social
Además de su agenda académica, la investigadora aprovechó la instancia para dar a conocer el Programa Ciencia al Tiro, iniciativa de divulgación científica que dirige en la región de Valparaíso y que trabaja con escolares de comunidades vulnerables. En el marco del congreso, la doctora Whitlock donó libros del programa, que fueron sorteados entre los asistentes. “Quedaron muy impresionados con la idea de acercar la ciencia a niñas y niños de sectores más vulnerables. Para mí es fundamental que la ciencia no se quede solo en los laboratorios”, destacó.
Sobre su evaluación del encuentro, la académica subrayó la alta participación femenina en los dos congresos, además de la diversidad internacional del público. “Asistieron personas de Argentina, Chile, Estados Unidos, Canadá, en el Pan American Neuroendocrine Society Congress. Fue un espacio muy activo, con muchas mujeres científicas y con un ambiente de diálogo muy potente”, señaló.
La participación de la doctora Kathleen Whitlock en estas jornadas abrió nuevas redes de colaboración y un debate científico de alcance global, que según sus palabras es “fundamental para la comprensión y el abordaje de la infertilidad desde una mirada evolutiva y neuroendocrina”.



Nota: Pamela Simonetti